La coordinadora del nuevo programa de rehabilitación cardiaca para pacientes con insuficiencia cardiaca del Clínico subraya que la Fisioterapia en estas unidades es fundamental. Lo corroboran una de las primeras pacientes, Mª Teresa Camacho, y nuestra colegiada, Laura López.
El Hospital Clínico Universitario de Valencia ha incorporado a su cartera de servicios un programa presencial de rehabilitación cardiaca dirigido a pacientes con insuficiencia cardiaca.
Los principales síntomas de la insuficiencia cardiaca son la sensación de falta de aire y la limitación de la capacidad para poder realizar actividad física debido a la incapacidad del corazón para aumentar su trabajo. Ello conlleva un deterioro de la calidad de vida de los pacientes, así como una mayor dependencia social.
A pesar de que el ejercicio terapéutico es vital para estos paciente hasta ahora no contaban con Fisioterapia. “La inclusión de un programa de ejercicio físico presencial es un pilar fundamental para el manejo de estos pacientes. Las guías de práctica clínica nos dicen que la rehabilitación cardiaca basada en el ejercicio es una indicación máxima, clase 1A. La fisioterapia va a permitir que nuestros pacientes puedan mejorar su capacidad para hacer ejercicio y también su calidad de vida”, subraya la doctora Patricia Palau, adjunta del Servicio de Cardiología del Hospital Clínico y coordinadora del nuevo programa.
En la actualidad, la Unidad de Insuficiencia Cardiaca del Clínico atiende a más de 2.000 pacientes al año. Patricia Palau asevera que está demostrado que el ejercicio terapéutico reduce la re-hospitalización por insuficiencia cardiaca: “Es una patología con una prevalencia muy elevada en nuestra sociedad y en las últimas décadas ha ido en aumento. De hecho, es la primera causa con hospitalizaciones en pacientes mayores de 65 años. Si queremos reducir el número ingresos de esta población y mejorar su capacidad funcional e independencia, debemos integrar este tipo de programas, que hoy son escasos en España, y fomentar el papel tan importante que tiene la Fisioterapia en estos programas. Todas las unidades de insuficiencia cardiaca deben tener asociado un programa de rehabilitación cardiaca basado en el ejercicio. Y para prescribir ejercicio a un paciente con una patología hay que conocerla bien y en eso la formación del fisioterapeuta es fundamental”.
El papel del fisioterapeuta
El programa cuenta con un equipo multidisciplinar del que forma parte la colegiada del ICOFCV, Laura López. Se ofrece una atención integral que incluye optimización del tratamiento médico, valoración funcional y nutricional, educación en autocuidados y cambios de estilo de vida y, un pilar fundamental: un programa de ejercicio físico terapéutico individualizado para cada paciente. El objetivo principal es que recuperen la capacidad funcional y vuelvan a incorporarse al día a día de forma ordinaria.
Las fisioterapeutas prescriben y supervisan el programa de ejercicio terapéutico. “Con cada paciente establecemos un protocolo diferente según sus necesidades, su síndrome metabólico y su frecuencia cardiaca. Hacemos ejercicio aeróbico, bien elíptica, bicicleta estática, cinta rodante… y ejercicios de fuerza, tanto de miembros inferiores como superiores. Además, les enseñamos, o repasamos si ya lo conocen, ejercicios respiratorios y cómo realizar una inspiración diafragmática”, explica Laura López.
Ante la Ley 2/2022 que abre la puerta a que sean los preparadores físicos quienes prescriban ejercicio a personas con enfermedades, nuestra colegiada defiende que “aquí tenemos claro que deben ser los sanitarios quienes pauten el ejercicio en personas con patología”. De hecho, subraya que era necesario que el Clínico instaurara la Fisioterapia en esta unidad y que espera “que sea un proyecto que perdure y permanezca instalado en la sanidad pública porque la ayuda a este tipo de pacientes es muy grande”, argumenta Laura López.
La voz de los pacientes
María Teresa Camacho es una de las primeras pacientes del nuevo programa. Hace más de dos años empezó a notar que le costaba respirar. Un día se encontraba muy mal, fue a urgencias y tras realizarle multitud de pruebas le dieron el diagnóstico: insuficiencia cardiaca. Su perfil no es el más común dado que era deportista y es joven, tan sólo tiene 56 años, pero sí muy adecuado para ser una de las beneficiarias de este programa.
“Estoy muy contenta con todo el equipo, Laura, la fisioterapeuta me va controlando y enseñando los ejercicios. He descubierto que necesito un fisioterapeuta en mi vida; cuando sufres algo así ves lo importante que es que un profesional sanitario te marque las pautas. Solo llevo dos semanas pero gracias a este programa ya noto que no estoy peor, para mí es un gran paso y espero poder recuperar mi vida”, indica esta valenciana.
María Teresa Camacho sabe que el programa tiene un tiempo y que después tendrá que seguir sin esa guía profesional. Ella, que siempre había ido al gimnasio, manifiesta que en su opinión, “en todos los gimnasios debería haber un sanitario, un fisioterapeuta, que fuera marcando unas pautas a los monitores en función del tipo de ejercicios que puede hacer esa persona, aspectos que estos no suelen conocer”.
(*) El equipo del programa se compone de especialistas en cardiología, atención primaria y rehabilitación, personal de enfermería y de fisioterapia.
"He descubierto que necesito un fisioterapeuta en mi vida; cuando sufres algo así ves lo importante que es que un profesional sanitario te marque las pautas".
María Teresa Camacho
Paciente
"Aquí tenemos claro que deben ser los sanitarios quienes pauten el ejercicio en personas con patología... esperamos que el proyecto permanezca instalado en la sanidad pública porque la ayuda a este tipo de pacientes es muy grande".
Laura López
Fisioterapeuta
"Si queremos reducir el número ingresos de esta población y mejorar su capacidad funcional e independencia, debemos integrar este tipo de programas y fomentar el papel tan importante que tiene la Fisioterapia en ellos".
Patricia Palau
Cardióloga
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